Reflexión sobre el vídeo "Enganchados"

Las nuevas tecnologías si no se saben utilizar pueden crear adicciones en todo tipo de personas, pero existe un riesgo más alto para niños/as y jóvenes. Como hemos visto en el vídeo el abuso de las nuevas tecnologías genera adicciones que son similares a las que se producen en el consumo de drogas.

Las TICS han revolucionado la sociedad con sus posibilidades, pues han transformado nuestras vidas. Se ha desarrollado una nueva forma de conocimiento, de entretenimiento, de relación laboral, etc. Tienen una gran influencia en el desarrollo de nuestras estructuras sociales y muchos beneficios los cuales debemos incorporar en nuestros modos de vida, por eso se trata de educar en el buen uso, no de renunciar a ellas.

Los jóvenes hoy en día han crecido con este tipo de herramientas de la información y el conocimiento. Son necesarias para su educación y socialización pero debido a un mal uso o abuso de estas, se pueden convertir en un elemento sin el que no van a poder vivir, algo que les convierte en personas dependientes y prisioneras, sin capacidad de elegir en libertad. Muchos/as  de estos jóvenes no conocen otra forma de comunicarse.

Según el Instituto Nacional de Estadística, en España existe un 40% de personas que utilizan Internet. El 8% tiene una actitud compulsiva, y esto es un gran problema.

Hemos visto en el video el testimonio de vario jóvenes que nos han expuesto su problemática y como han ido intentando salir de su adicción. Los casos han sido muy diferentes pero el resultado el mismo. Al principio como en cualquier otra adicción el individuo no reconoce que tiene un problema, sobre todo por que se siente bien y el contacto con su adicción le reporta placer y satisfacción. Con el paso del tiempo todo cambia y lo que era placer y satisfacción se convierte en pesar, culpabilidad y degradación.

Según los estudios desde el campo de la psicología lo que se produce es una adicción psicológica, se crea una dependencia y una pérdida del control, que al principio como testimonian algunos de los jóvenes, les reporta placer y que después se convierte en culpa o dolor.

En nuestra sociedad actual la jornada laboral es muy extensa y por ello las empresas necesitan una comunicación constante y esto lo consiguen gracias a Internet. La jornada laboral hace que muchos padres y madres no puedan estar pendientes como se debería de la crianza y educación de sus hijos e hija, con lo que esto supone un gran peligro ya que éstos y éstas tienen a su alcance muchas herramientas pertenecientes a las TICS, como son teléfonos móviles, videoconsolas, ordenador, Internet, videojuegos, etc., cuyo mal uso puede hacer que caigan en una adicción que puede cambiarles la vida.

Muchos/as jóvenes se encuentran solos en sus casas y comienzan a pasar su tiempo más con las nuevas tecnologías que con su familia o sus amistades. Algunos tienen problemas de timidez o falta de autoestima y encuentran en recursos como el chat o las redes sociales una forma más cómoda de relacionarse, con lo que cada vez se aíslan más y dejan de salir a la calle a buscar otro tipo de contactos.

Los juegos tradicionales han sido desplazados en esta nueva sociedad de la información y el conocimiento por las videoconsolas. Las calles están casi vacías de niños y niñas. Se produce un aislamiento desde edades muy tempranas, pasando muchas horas en sus habitaciones, solas y solas y con algún tipo de nueva tecnología, como teléfonos móviles, videoconsolas u ordenadores.

El aislamiento lleva cada vez más a estos niños y niñas a preferir amigos virtuales que amistades con otros /as iguales. Es más fácil la comunicación virtual pues se domina, no hay que guardar formas de educación o comportamiento, no implica respetar a la otra persona, dialogar, etc., sino que se puede imponer la voluntad del/a que juega. Cada vez se olvidan más de las normas sociales y empieza a no interesarles la formación educativa, el diálogo con otras personas, etc.

Muchas veces como escuchábamos en el vídeo los/las jóvenes se reúnen a jugar a los video juegos pues el jugar bien es un síntoma de prestigio dentro de su colectivo. Se crea un liderazgo cuanto más juegues, más venzas a tus héroes virtuales y más rápido muevas tus dedos a través de los mandos. Esto les reporta un crecimiento en su autoestima y en la valoración social, lo que les hace sentirse importantes y poderosos/as.

No olvidemos que el ser humano es un ser social y se desarrolla en comunidad y con la presencia de otros seres humanos, Así adquirimos nuestra identidad social y se reafirma la identidad personal. No poseer esta socialización nos convierte en seres aislados, excluidos y no participantes de la sociedad, nos excluye como ciudadanos/as de pleno derecho. Por lo tanto este tipo de personas se convierte en un grupo en riesgo grave de exclusión social.

Las nuevas tecnologías ofrecen muchas posibilidades y nadie tiene por qué renunciar a ellas. Nos ofrecen posibilidades de educación, conocimiento, información, educación, aprendizaje, etc.

La solución ha este tipo de adicciones, como a muchas otras está en una buena base educativa, tanto en la familia como en las distintas instituciones educativas. El compromiso y la preparación para realizar un buen uso de éstas son de padre, madres y educadores/as.

 La publicidad debe no ser engañosa, pues muchas veces llevan a niños y niñas a falsas creencias, las cuales comienzan a intentar imitar a toda costa. Si todos y todas colaboramos a través de la coeducación y corresponsabilidad en el uso correcto podemos transmitir las ventajas de las TICS y prevenir sobre sus desventajas o riesgos a niños, niñas y jóvenes en un futuro. 

Cuando a pesar de todo se inicia una persona en esta adicción hemos de intentar reeducarla en las posibilidades y en los riesgos. Hemos de conseguir que interiorice los riesgos y los anule lo más posible. En este campo y en el anterior los educadores/as sociales tenemos mucho que decir, pero para ello nosotros/as mismos como profesionales y como personas debemos hacer un trabajo educativo y de preparación personal, ya que si no lo hacemos corremos el riesgo de no saber ayudar realmente, ni educar de una forma positiva pudiendo hacer mucho daño a otras personas.

Hemos de conseguir a través de la educación, en cualquiera de sus formas, que las personas sean capaces de conocer, concienciarse, interiorizarse, conocerse, corresponsabilizarse con la sociedad y con las personas, que sean capaces a su vez de coeducar, pues la educación no es una cosa impuesta, o que provenga solo desde el polo del educador/a, ya que si partimos de esta base, la educación no se asimila, sino que se ve como algo obligado a cumplir, pues si no lo haces estás mal visto o te sancionan y esto no es útil para la independencia y autonomía en los seres humanos.